Cronicas de Chachapoyas 6: Aya-Chaqui

Sin categoría

Los santuarios arqueológicos son uno de los puntos que más interés provocan en quienes visitan Chachapoyas. A algunas horas de la ciudad hay varios de ellos. El más conocido de todos es Karajía, pero en nuestro caso optamos por visitar Aya-chaqui, luego de escuchar los consejos de Amado, nuestro guía por Kuelap. Para llegar hasta allí hay que viajar unas dos horas en auto, por lo que es una excursión que les ocupará buena parte del día. Parte del camino es de cornisa, pero luego de estar varios días por allí, la enorme caída a los costados les parecerá de lo más normal. Como se encuentra en una zona bastante alejada, llegar en bus o transporte público no es nada sencillo. La recomendación es intentar arreglar con algún taxista o directamente contratar en alguna agencia de viajes. Los precios no son diferentes a otras excursiones, y van de 50 a 60 soles por persona (de 17 a 20 dólares, aproximadamente). En nuestro caso arreglamos directamente con Carlos Burga, del hotel Revash, que fue con nosotros como guía. El tour incluyó una comida en Luya, donde probamos el delicioso jugo de tumbo.

Para llegar hasta el santuario de Aya-Chaqui, una vez que bajan del auto, hay que caminar entre 20 minutos y media hora. Buena parte es en subida, por un sendero todavía bastante poco consolidado. Si tienen vértigo o miedo a las alturas, la van a pasar un poco mal. Pero si están acostumbrados a caminar por la sierra les va a gustar mucho. El paisaje, por cierto, no se les va a olvidar rápidamente. Antes de subir, podrán apreciar esta construcción:

Santuario en Aya-Chaqui

Pero lo más interesante se encuentra arriba, donde hay una serie de sarcófagos ubicadas sobre un risco. Los chachapoyas enterraban a sus muertos en las alturas, y hay que reconocer que ubicar las tumbas en esos lugares era una verdadera hazaña.

Sarcofagos de Aya-Chaqui, mas en detalle

Los sarcófagos están hechos, como puede apreciarse sin demasiados problemas, con adobe, y una estructura de cañas que recubre el cuerpo. Sobre ella, colocaban y modelaban la cabeza. El resultado se integra con el entorno de manera muy armónica, pero basta con que la luz dé sobre ellos para que se destaquen de manera espectacular.

Santuario de Aya-Chaqui

Lo bueno de Aya-Chaqui es que, tras una caminata no demasiado larga, se puede llegar hasta una distancia muy cercana a los sarcófagos -unos 30 metros. Recuerden que están enclavados en un risco, y que su acceso no es tan sencillo. A otros sitios, como a Karajía, cuesta más acceder y la distancia a los sarcófagos es mayor. Por cierto, Aya-Chaqui está abierto desde hace poco tiempo al turismo, y ni siquiera hay que pagar entrada para llegar hasta allí.

Por cierto, si alguien visitó Karajía, Leymebamba, Laguna de los Cóndores o Revash, sería bueno que aprovechara sus comentarios para contar su experiencia, ya que por falta de tiempo no pude visitar esos lugares. Los alrededores de Chachapoyas tienen varios lugares interesantes para conocer, pero casi todos ellos implican una excursión de un día. Así que para aprovechar bien la estadía lo mejor es quedarse en la ciudad varios días. Para ser sincero, si se quedan una semana no se van a arrepentir.

Volver arriba
Mastodon