Sin categoría

Primero la cita.

“Me encantan las medialunas, el mate a la mañana, el club y estar con mis amigos. Me encanta conocer gente, opinar, discutir, hablar apasionadamente, la montaña, la Pampa, los misterios que esconde el norte y la magia que despierta la Patagonia (…) Me encanta el café de la esquina, la rayuela, la mancha y los chicos en las calles, el barrio, Cortázar y Borges, Piluso, Patoruzú, Petete, las canciones de Sandro y el tango. Me encantan los asados en familia, el chimichurri y el choripán. El vino de Mendoza, las empanadas de Salta, el dulce de leche y el flan. Me encanta ver jugar a la selección, y los colores de la camiseta. Me encanta saber que soy de acá, me encanta que este sea mi lugar”.

Toda esta banal recopilación de lugares comunes de qué significa “ser argentino” no ha sido redactada por un folklorista defensor de nuestras “tradiciones”, sino que se encuentra en los manteles que Mc Donald’s coloca debajo de sus menúes, como parte de su campaña publicitaria “Sabores Nuestros”. La cadena de fast-food lleva así bien lejos la premisa de hacer estrategias globales de marketing regionalizado. Es un poco aprender la lección de Coca Cola, que en los mundiales auspicia a todas las selecciones nacionales que llegan a la competencia. Unir la marca con ciertos símbolos nacionales es una de las formas favoritas de las empresas multinacionales a la hora de conservar su participación de mercado.

Pero también hay problemas locales. Quienes viven fuera de la Argentina tal vez desconozcan que McDonald’s pasó por serios problemas debido a denuncias por mala higiene, que incluso fueron relacionadas con la muerte de un menor. Debido a ello, la franquiciante local de la multinacional decidió enfatizar sus atributos de “empresa argentina” que daba trabajo a gente de este país. Además, optó por hacer varias agresivas campañas para que el consumidor visite sus cocinas y compruebe la calidad de la higiene.

En el fondo, la estrategia actual de McDonals’s es instalar una nueva cadena de significados, del tipo “Argentina – Mc Donald’s”; o al menos, dejar de lado la anterior, que era “McDonald’s / Estados Unidos”. La compañía ha aprendido que lo que alguna vez fue una asociación positiva hoy es rechazada por mucha gente. ¿Será esto lo que llaman anti americanismo?

No deja de ser interesante que una empresa multinacional apele, en su estrategia de conservación de mercado, a una rancia compilación de esencialismos nacionalistas. Incluso, es un punto interesante de análisis.

Y a todo esto: Mafalda no tiene una “visión divertida de la realidad”. Yo que Quino, les haría juicio.

Volver arriba
Mastodon